Cada miércoles un cuento en El Estafador

lunes, 3 de marzo de 2008

Líneas aéreas

Estaba en mi patio fumando cuando he visto pasar una bandada de gaviotas. La primera vez que las vi me pregunté qué harían encima de mi casa si vivimos a más de cincuenta kilómetros del mar. Lo comenté en una reunión de amigos y alguien me dijo que es que iban a un vertedero que no está muy lejos de Espinardo, mi pueblo. Con lo romántico que era ver volar a las gaviotas, soñando con el rumor del océano, y resulta que iban a picotear entre la basura. Y es lo que tienen estos pájaros, por un lado son muy evocadores pero por otro muy miserables. Porque no sólo se alimentan de deshechos, también picotean los ojos de los náufragos y cosas por el estilo. ¿Quién querría a un animal así como símbolo? Hay que estar loco.

Por encima de mi casa pasan también los aviones. Se ve que hay una de esas autopistas aéreas que llaman. Las noches de verano, fumando en la hamaca, veo luces rojas parpadeantes sobrevolándome. Y la imaginación se me llena de viajes y destinos misteriosos. Siempre he querido huir... y quién no.

1 comentario:

lapatachunga dijo...

Huir, poco se escucha la palabra para lo mucho que se piensa. Y con bebés más