Cada miércoles un cuento en El Estafador

miércoles, 5 de octubre de 2011

Tontunas de escritor

Al final de "La muerte de Amalia Sacerdote", Andrea Camilleri aclara que, a pesar de que en la novela salen periodistas y políticos, nunca ha estado en la RAI y nunca ha sabido cómo funciona por dentro una redacción. De la misma manera, admite no saber nada acerca de las asambleas regionales y sus diputados. Ni siquiera, explica, ha querido informarse. Y sentencia: Todo, pues, es fruto de mi fantasía.


Puede ser una exageración, o no, pero me gustó la defensa que hace Camilleri de la fantasía pura. En mi opinión, la documentación en literatura es terrible. Algunos autores parecen regodearse en datos y detalles irrelevantes. Hay que hacer como Camilleri, inventarlo todo.


Lo anterior no impidió que me pasara buena parte del domingo haciendo esto:




Son fechas, nombres propios, lugares, sucesos históricos. Con ellos quiero escribir un cuento, quién sabe si una novela corta. Ah, soy un inconsistente.


PD: Las tontunas son las mías, no las de Camilleri, claro.


4 comentarios:

mona dijo...

¡Si que estas tontuno!

Andrea dijo...

Ojala lo hagas... algún día

Sixette dijo...

Uf, a mí me repatean las novelas de ambientación histórica en las que la gente se expresa como ahora, o tiene los mismos valores democráticos. Tomarse licencias literarias está muy bien, pero si se hace porque no son capaces de imaginar otra forma de pensar, en lugar de abrir la fantasía la limitan.

elhombreamadecasa dijo...

Mona, y eso que no cuento todas mis tontunas, por cierto, vaya un repaso que le has hecho a las últimas entradas. Muy bien.

Andrea, en cuanto termine tres cosas que tengo a medio, me pongo con ello.

Sixette, por eso lo mejor es inventárselo todo. Me encanta tu nick.