jueves, 22 de enero de 2009
Matemáticas pasmosas
Ella: ¿Vas a ir mañana al Mercadona?. Yo: Sí, tengo que comprar las truchas. ¿Truchas? ¿Otra vez? ¿Cómo que otra vez? No quedan yogures. No puede ser, si compré un montón el lunes. Pues no quedan.
Entonces hicimos cuentas. Dos niños. Dos yogures al día cada uno. Siete días a la semana. Total: ¡28 yogures a la semana! Empieza a ser urgente comprar un frigorífico más grande.
Cuando nos repusimos del pasmo continuamos la conversación. Yo: ¿Por qué has cambiado de tema con lo de las truchas? ¿Qué querías decir con "otra vez". Ella: No quería decir nada. Ya, seguro, me da mucho rabia que me tomes por tonto. No te tomo por tonto. Pues dime entonces qué querías decir con "otra vez". Que hiciste truchas hace poco. Pero esta vez las voy a hacer a la segoviana. Precisamente. No me lo puedo creer, me paso el día en la cocina, ¿y así me lo agradeces? No digo nada, solo que estaría bien que hicieras otras cosas. ¡¿Otras cosas?! Tengo un recetario de lo más extenso y variado. Bueno, vale, no quiero discutir. ¿No quieres discutir? pero si has empezado tú. De verdad, déjalo, me encantan las truchas a la segoviana. Seguro, pues que sepas que a las tuyas no les pienso echar jamón, hala.
Publicado por
elhombreamadecasa
Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con FacebookCompartir en Pinterest
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
4 comentarios:
A veces, cuando explicas tus cuitas maritales, siento que me he colado con una cámara espía en vuestra vida íntima... y de rebote me encuentro observándome a mí mismo con mi pareja (de ya casi 20 años). Es decir, tus historia particulares pasan a ser Universales y después nuevamente particulares (pasadaz por el tamiz propio).
A lo que iba: hay que ver las chorradas que en ocasiones nos hacen acabar discutiendo a las personas!!
(Por cierto, a ver cuándo me invitas a una de esas magníficas truchitas con jamón, que a mí me encantan!!)
Que rencoroso eres jajajajaja.
Y que sepas que pienso comprar truchas para cuando vengáis.
Ah... y jamón
UUUUUUhhhmmmmmmmm... Quiero truchas!!!
Seguro que te salen cojonudas.
Hermano, las parejas somos como los individuos, cada cual único pero todos muy parecidos entre nosotros.
Federico, a.k.a. papá, ¿qué tal estarían unas truchas al cabrales? Suena regular pero habría qué probarlas. No me imagino nada con cabrales que esté malo.
Publicar un comentario